Tratamientos no quirúrgicos para la estenosis de la arteria carótida




Tratamientos no quirúrgicos para la estenosis de la arteria carótida

Tratamientos no quirúrgicos para la estenosis de la arteria carótida

Estenosis de la arteria carótida

¿Qué es la estenosis de la arteria carótida?

La estenosis de la arteria carótida es una condición en la cual las arterias que suministran sangre al cerebro se estrechan debido al depósito de placa en sus paredes. Esto puede reducir el flujo sanguíneo y aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular.

Placa en las arterias

Tratamientos no quirúrgicos

Anteriormente, la única opción de tratamiento para la estenosis de la arteria carótida era la cirugía invasiva conocida como endarterectomía carotídea. Sin embargo, en los últimos años se han desarrollado tratamientos no quirúrgicos que ofrecen alternativas más seguras y menos invasivas.

1. Angioplastia y colocación de stent

La angioplastia y colocación de stent es un procedimiento en el cual se inserta un catéter a través de una pequeña incisión en la ingle y se guía hasta la arteria carótida estrechada. Luego, se infla un pequeño balón en el extremo del catéter para abrir la arteria y se coloca un stent para mantenerla abierta.

Angioplastia y colocación de stent

2. Terapia de ultrasonido

La terapia de ultrasonido utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para romper la placa acumulada en las arterias. Durante el procedimiento, se aplica un dispositivo de ultrasonido sobre la piel cerca del área afectada y se emiten las ondas sonoras. Esto ayuda a reducir la obstrucción y mejorar el flujo sanguíneo.

Terapia de ultrasonido

3. Medicamentos

En algunos casos, se pueden recetar medicamentos para controlar los factores de riesgo asociados con la estenosis de la arteria carótida, como la hipertensión arterial y el colesterol alto. Estos medicamentos pueden ayudar a mantener las arterias más limpias y prevenir la progresión de la enfermedad.

Consideraciones finales

Si te han diagnosticado estenosis de la arteria carótida, es importante buscar el consejo de un especialista en enfermedades vasculares para determinar el mejor tratamiento para tu caso específico. Los tratamientos no quirúrgicos mencionados anteriormente ofrecen alternativas seguras y efectivas para abordar esta condición y reducir el riesgo de complicaciones graves como los accidentes cerebrovasculares.

Especialista en enfermedades vasculares