Insuficiencia Venosa Pélvica (PVI): Afecta a Millones de Mujeres


Según el American Journal of Radiology, el dolor pélvico es una afección común que afecta a millones de mujeres en todo el mundo. Ocurre cuando las venas de la pelvis no pueden drenar adecuadamente la sangre del área. Esto puede provocar una serie de problemas, que incluyen dolor, hinchazón e incluso problemas de fertilidad. La PVI a menudo conduce a PCS, que es una afección crónica que causa dolor intenso y sensibilidad en la parte inferior del abdomen, la espalda, las caderas y los muslos. Obtenga más información sobre PVI y lo que puede hacer para prevenir y controlar los síntomas.

¿Qué es la insuficiencia venosa pélvica?

La insuficiencia venosa pélvica (PVI, por sus siglas en inglés) es una afección que ocurre cuando las venas de la pelvis no pueden drenar adecuadamente la sangre hacia el corazón. Esto puede causar una acumulación de sangre en la región pélvica. La insuficiencia pélvica se produce cuando se ve comprometida la circulación en las principales venas pélvicas.

La sangre se acumula dentro del sistema venoso causando presión en las paredes de las venas. Con el tiempo, las venas se hinchan y dilatan para adaptarse al flujo sanguíneo. Las válvulas unidireccionales en las venas se debilitan, lo que permite que la sangre fluya hacia atrás y se acumule, lo que provoca una mayor presión en las paredes venosas ya debilitadas. La hinchazón venosa y la presión sobre los órganos y tejidos adyacentes conducen al síndrome de congestión pélvica o PCS.

Si no se trata, el daño a las venas puede volverse permanente y se necesitan procedimientos quirúrgicos para corregir el problema. Representa el 25% de todas las histerectomías y el 33% de todos los procedimientos laparoscópicos de investigación realizados para el dolor pélvico. Las principales causas de dolor pélvico en las mujeres incluyen el síndrome de congestión pélvica o PCS y la insuficiencia venosa pélvica o PVI.

En algunos casos, PVI también puede provocar varicosidades pélvicas, que son venas agrandadas que son visibles debajo de la piel. Si bien la PVI es relativamente común, a menudo se subdiagnostica debido a la falta de conocimiento entre los pacientes y los profesionales médicos.

¿Estoy en riesgo de insuficiencia pélvica?

Cualquier mujer puede desarrollar PVI, pero existen ciertos factores que pueden aumentar su riesgo. Las mujeres en edad fértil, entre 20 y 45 años de edad, tienen mayor riesgo de PVI. Los embarazos múltiples también aumentan el riesgo. PVI también se asocia con la obesidad y el rápido aumento de peso debido al aumento de peso del feto, el útero y los tejidos abdominales que presionan las venas pélvicas. Otros factores de riesgo incluyen coágulos de sangre y antecedentes de venas varicosas.

Estos factores de riesgo incluyen:

  • Tener sobrepeso u obesidad
  • El embarazo
  • Uso de pastillas anticonceptivas
  • Cambios hormonales durante la menopausia
  • Antecedentes familiares de insuficiencia venosa
  • Historia de coágulos de sangre.
  • Estilo de vida sedentario

¿Cuáles son los síntomas de la insuficiencia pélvica?

Los síntomas de PVI pueden variar de mujer a mujer. Pueden ser leves o graves y pueden aparecer y desaparecer con el tiempo. El síntoma más común es el dolor pélvico. Este dolor puede ser sordo y doloroso o agudo y con calambres. Suele empeorar durante la menstruación o después de estar de pie durante largos períodos de tiempo.

Otros síntomas pueden incluir:

  • Dolor pélvico
  • dolor pélvico crónico
  • Pesadez o presión en la pelvis
  • periodos dolorosos
  • Dolor con el coito
  • Dolor de espalda baja
  • Dolor o hinchazón en las piernas
  • Dolor o palpitaciones en las piernas
  • Hinchazón en las piernas o los pies
  • Sangrado anormal
  • Esterilidad
  • Incontinencia urinaria
  • Estreñimiento
  • Hinchazón o gas
  • Venas varicosas en la pelvis o las piernas

¿Cómo sé si tengo Insuficiencia Venosa Pélvica?

PVI puede tener muchos síntomas que parecen otras dolencias. Al igual que las venas varicosas, la insuficiencia venosa pélvica también puede no presentar síntomas. En la mayoría de los casos, los posibles síntomas incluyen dolor intenso y sordo en el área pélvica, la parte baja de la espalda, las nalgas y los muslos.

La pesadez a menudo se asocia con el dolor, y la menstruación y estar de pie durante mucho tiempo tienden a empeorar los síntomas. También pueden ocurrir dolor en las relaciones sexuales y síntomas urinarios. Los tejidos venosos dilatados también liberan sustancias químicas neurotransmisoras, lo que provoca depresión y ansiedad adicionales junto con el dolor.

La única manera real de saberlo es haciéndose revisar por un médico.

¿Cómo se diagnostica la insuficiencia pélvica?

Para diagnosticar PVI, su médico probablemente realizará una ecografía pélvica u otra imagen del tejido. Una ecografía es una prueba indolora que usa ondas de sonido para crear una imagen de su pelvis. El médico buscará venas dilatadas y flujo sanguíneo anormal.

Las pruebas que se pueden realizar incluyen:

  • Ultrasonidos para visualizar la estructura venosa alrededor de los órganos abdominales y reproductivos. Los ultrasonidos Doppler permiten al médico visualizar la circulación venosa en tiempo real.
  • Las tomografías computarizadas brindan la oportunidad de medir los diámetros de las venas afectadas para diagnosticar la gravedad potencial de la afección.
  • Las resonancias magnéticas con y sin contraste brindan una excelente herramienta de diagnóstico para examinar el alcance de la acumulación de sangre y la congestión en las áreas afectadas.
  • La venografía es un procedimiento invasivo que se realiza cuando las imágenes no invasivas no son suficientes para proporcionar un diagnóstico definitivo. Se inyecta medio de contraste mediante un catéter directamente en las venas pélvicas y se toman medidas para diagnosticar la gravedad de la dilatación venosa.
  • Ultrasonido Doppler: esta prueba utiliza ondas sonoras para medir la velocidad y la dirección del flujo sanguíneo.
  • Venografía pélvica: esta es una prueba de imagen que usa rayos X para tomar imágenes de las venas pélvicas después de inyectarles un tinte.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento para la insuficiencia pélvica?

Hay varias opciones de tratamiento disponibles para PVI, que van desde tratamientos conservadores hasta cirugía. El tipo de tratamiento recomendado dependerá de la gravedad de sus síntomas y de qué tan bien responda a las terapias conservadoras.

Tratamientos conservadores: estos incluyen usar medias de compresión, elevar las piernas cuando sea posible y evitar estar de pie o sentado por mucho tiempo. La pérdida de peso, si tiene sobrepeso, también puede ayudar a aliviar los síntomas.

Tratamientos medicinales: Los tratamientos no quirúrgicos de PVI y PCS están dirigidos a tratar la disfunción ovárica. El manejo hormonal con píldoras o tratamientos anticonceptivos a base de progesterona se utiliza por sus efectos de contracción en las venas. En algunos casos, los implantes inhibidores de estrógenos se utilizan en el tratamiento de la PVI.

Tratamientos intervencionistas: si los tratamientos conservadores no alivian sus síntomas, su médico puede recomendar tratamientos intervencionistas. Las opciones de intervención están dirigidas a corregir la congestión de las venas pélvicas al bloquear el flujo de sangre al área afectada mediante embolización. Estos incluyen inyecciones de agentes esclerosantes para cerrar las venas afectadas o cirugía para extirpar las venas afectadas.

Tratamientos quirúrgicos: si otros tratamientos no han funcionado o no son una opción, su médico puede recomendarle una cirugía mayor para extirpar las venas afectadas. Esto incluye ligadura y extracción de las venas afectadas. En casos severos y debilitantes que no responden a tratamientos médicos o quirúrgicos menos invasivos, es posible que se requieran histerectomías totales o parciales para evitar daños irreversibles en los tejidos.

Vivir con insuficiencia pélvica

Si le han diagnosticado PVI, hay algunas cosas que puede hacer para ayudar a controlar sus síntomas y mejorar su calidad de vida.

  • Use medias de compresión: usar medias de compresión puede ayudar a reducir el dolor y la hinchazón al promover la circulación.
  • Eleve sus piernas: Elevar sus piernas cuando sea posible ayudará a reducir la hinchazón.
  • Evite estar de pie o sentado por mucho tiempo: estar de pie o sentado por mucho tiempo puede empeorar los síntomas al aumentar la presión sobre la pelvis.
  • Mantenga un peso saludable: si tiene sobrepeso, perder peso puede ayudar a reducir los síntomas al reducir la presión sobre la pelvis.
  • Ejercicio: El ejercicio puede ayudar a mejorar la circulación y fortalecer los músculos alrededor de la pelvis.
  • Coma una dieta saludable: Comer una dieta saludable puede ayudar a mejorar la circulación y reducir los síntomas.
  • Controle el estrés: el estrés puede empeorar los síntomas, por lo que es importante encontrar formas de controlar el estrés. las técnicas de relajación, como el yoga o la meditación, pueden ser útiles.

Obtenga alivio de PVI

La insuficiencia venosa pélvica (PVI) es una condición que afecta a millones de mujeres y puede provocar una serie de síntomas debilitantes. Si cree que puede tener PVI, es importante consultar a un médico para que pueda obtener un diagnóstico preciso y encontrar la opción de tratamiento adecuada para usted. Su médico de atención primaria u obstetra puede derivarlo a un especialista en venas para realizar más pruebas y controlar sus síntomas. ¡Llame a los especialistas en venas de The Vein Center en Belle Meade y Mt. Juliet, Tennessee al 615-269-9007! Le ayudaremos a tomar las mejores decisiones posibles específicas para su caso.